miércoles, 22 de enero de 2014




Cuando el lago ofrece a la luna su mayor reflejo
La muchacha llorosa y desnuda, se entrega a los
Brazos de la mas filosa arma…bellisima daga que
en su garganta es la caricia que el nunca devolvió…

el infame se atrevió a clavarle los ojos e irse,
Dejándola sumergida en un torrente de pensares negros
e ideas mas frías aun…

Tengo mujer e hijos-le habría dicho-
Y la muchacha que no conocía las trampas del amor,cayo
En la mas vil y antigua…entonces sublime su sangre empezó a viajar
Desde el femino cuello hasta las diáfanas aguas del lago.

Cuna de brazos helados que recibe a la enamorada…
entre su liquidez protectora…
al igual que una madre lo hace…el lago besa el cuerpo que aun late,
Lo envuelve en heladas algas y lo conduce a su abismo
Mas tierno, el que sera su nuevo aposento,

Ese…donde la luna cada noche dará su beso,
y aquel hombre volcara
Calientes lagrimas de traición…y utilizara
la misma bellisima daga,aquella de brillo fugaz…

y hundirá en su pecho todo el dolor que le dio a la inocente
una noche,cuando la poseyó y luego abandono…
la daga que apago el sufrimiento de la dulce joven
sera la que imparta el castigo en la conciencia varonil e impía…

solo entonces el lago volverá a ser el reflejo de la luna
redondez de los cielos que durante varias noches
fue la testigo de tantos besos entre ellos…
y de las mentiras de la boca masculina

la luna y el lago vuelven a su unión,
la justicia que imparte la sangre mas fuerte esa noche  gritó…
y la muchacha ya no casta, entre las profundas piedras
al tranquilo sueño entrego su cuerpo,vacío de amor…

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